¿Pueden las unidades SSD perder datos sin alimentación?

Para algunas personas, las unidades de estado sólido (SSD) representan una nueva y esperada era en la innovación del almacenamiento que nos hace avanzar a pasos agigantados. Para otros, las SSD representan una innovación inestable que no está a la altura de sus expectativas y que puede dejar de funcionar en cualquier momento. Ambas afirmaciones no son siempre incorrectas, ya que esta innovación en materia de almacenamiento es bastante novedosa, pero al mismo tiempo presenta algunos defectos que hacen que las personas se replanteen la adquisición de estas unidades. Un nuevo informe del Joint Electron Gadget Engineering Council (JEDEC) incluye otra preocupación sobre los SSD: Quizá no sean capaces de mantener su almacenamiento durante largos periodos de tiempo sin energía. ¿Es esto cierto? ¿Y qué se puede hacer al respecto?

¿Por qué existe el problema?

El procedimiento de arranque de su sistema informático, en su tipo más simple, toma su sistema operativo de su almacenamiento y lo compone en la memoria RAM. El factor de su equipo tiene que ir a través del procedimiento de arranque de nuevo cuando se corta la energía es ya que la memoria RAM no puede mantener la información sin poder. Dicho esto, los SSD funcionan con chips que se asemejan a la RAM (de ahí el término “estado fuerte”; no hay partes móviles). La cuestión de la pérdida de datos es práctica si se piensa en este contexto. Sin embargo…

Las unidades SSD funcionan con chips similares a la memoria RAM.

Las unidades SSD no utilizan chips de memoria RAM. Utilizan chips flash NAND que tienen varios cables de entrada que mantienen su estado incluso después de que se corte la alimentación. La memoria flash tiene una característica especial llamada “puerta flotante” que está aislada eléctricamente. Debido a este aislamiento, no hay (en teoría) ningún impacto externo estándar que pueda cambiar inmediatamente su estado. Eso es lo que la convierte en un práctico artilugio de almacenamiento de larga duración.

El informe del JEDEC, sin embargo, nos dice que la temperatura a la que se guarda el dispositivo cuando no está activo (no fluye energía a través de él) puede disminuir la esperanza de vida de la información que contiene. El informe recomienda que la vida útil perfecta de dos años de un SSD sólo se ofrece a un nivel de temperatura máxima de almacenamiento de larga duración de 25 grados Celsius (77 grados Fahrenheit). Si se aumenta la temperatura en 5 grados centígrados, se reduce la vida útil a la mitad, es decir, a un año.

¿Debe preocuparse?

En principio, creo que utilizará su SSD de forma semirregular o diaria, ¿verdad? Si quieres mantenerlo durante un largo periodo de tiempo, deberías estar guardándolo en un rango de temperatura cómodo durante menos de dos años (¿quién aparta ese tipo de hardware tanto tiempo?). Esto ya empieza a parecer que no es un gran problema.

Chip de memoria RAM Samsung 316.

Además, el lenguaje del estudio recomienda que las predicciones sean al menos cuasi-teóricas. El método no se describe con mucha claridad y no se indica el número de unidades que se probaron. La conclusión del informe es que “las diferentes temperaturas introducen diferentes mecanismos de fallo de la NAND”. En términos sencillos, esto implica que reconocen que la temperatura influye en el tiempo que se pueden conservar los datos cuando la unidad SSD está sin alimentación. Pero el tiempo, como el de cualquier otra memoria flash, depende de la propia unidad.

Sí, es posible que haya una preocupación. Este artículo no está indicado para criticar el informe. Su conclusión es especulativa, pero sigue siendo esencial. Preferiblemente, debería tratar bien su SSD y mantenerla en un lugar de baja temperatura. De lo contrario, simplemente utilícelo. Si desea guardar algo que pueda permanecer mucho tiempo sin alimentación, utilice un disco duro mecánico. Estas son realmente sugerencias de buen criterio. Para la cantidad de tiempo que los SSDs han estado alrededor, desde 2015, sus restricciones aún no se encuentran completamente, y el informe de JEDEC es una buena acción en la dirección correcta.