La nube se ha vuelto masiva desde que empezó a convertirse en un fenómeno. En particular, el almacenamiento en la nube parece ser el servicio más interesante (y de más rápido crecimiento) tanto para el mercado de consumidores como para el de empresas. A medida que pasan los años, el ancho de banda sigue siendo más barato. Esto hace que el espacio de almacenamiento en la nube sea más accesible, en algunos casos, que la compra de un nuevo disco duro para algunas personas. Sin embargo, para los que seguimos trabajando mucho con ordenadores personales, el disco duro externo siempre será una opción. Esto nos lleva a una pregunta: ¿Cuál es mejor?

Evaluar el almacenamiento en la nube

cloudstorage-cloud

El almacenamiento en la nube es más barato cada año que pasa. La cuota mensual que pagas te garantiza una determinada cantidad de espacio para tus archivos, que estarán guardados de forma segura en un centro de datos lejos de tu casa. Esto tiene muchas ventajas, por supuesto:

  • No tienes que invertir mucho a corto plazo. En lugar de desembolsar 300 dólares en una buena unidad de disco duro (HDD) de alto almacenamiento o en una unidad de estado sólido (SSD), más cara pero más rápida, puedes pagar tan sólo 15 dólares al mes por cada terabyte de espacio en línea.
  • Si algo terrible le ocurre a tu casa, tus datos seguirán estando ahí. Esto es especialmente ventajoso si los archivos que guardas son importantes para hacer negocios.
  • Puedes acceder a tus archivos en cualquier lugar accediendo de forma segura a una cuenta sin ninguna molestia. Sí, puedes hacer esto con el almacenamiento físico configurando un servidor FTP, pero no va a ser tan seguro como, por ejemplo, Google Drive.
  • Los servicios de almacenamiento de alta calidad almacenarán copias de seguridad redundantes de sus copias de seguridad. Si algo le sucede a su unidad, tus datos siguen estando seguros.

Todas estas son ventajas maravillosas, pero hay muchas advertencias relacionadas con el almacenamiento en la nube:

  • A largo plazo, tu inversión podría superar el precio de un disco duro. Digamos que pagas 15 dólares al mes por 1 TB de espacio de almacenamiento online. En unos dos años, habrás pagado lo suficiente para comprarte un disco duro de 1 TB de gama alta.
  • Los datos que almacena están sujetos a las condiciones de un acuerdo. Algunos de estos acuerdos pueden permitir que el proveedor examine tus archivos o los entregue a otra persona si lo solicita.
  • Renuncias al control absoluto de tus datos (es decir, a menos que utilices la encriptación de terceros antes de almacenarlos).
  • La carga y descarga de archivos de tu proveedor de almacenamiento depende de la velocidad de conexión tanto tuya como de tu proveedor. La velocidad de transferencia, en muchos casos, es inferior a la de un disco físico.

Evaluar el almacenamiento físico

cloudstorage-tape

Ya has visto todo lo que hay que ver sobre el almacenamiento en la nube. No he hablado de la fiabilidad porque, en los tiempos que corren, al menos podemos esperar que la mayoría de los proveedores de almacenamiento sean considerablemente estables. Pero todavía hay razones por las que podrías querer seguir almacenando todos tus archivos más importantes en una unidad física:

  • Los discos duros son cada vez más baratos. Incluso en países que imponen varios impuestos frívolos a la electrónica (como el mío), un disco duro decente de varios terabytes no le costará más de unos cientos de dólares. El almacenamiento en cinta es incluso más barato, permitiéndote comprar una cinta de 1,6 TB por precios tan bajos como 40 dólares (aunque las unidades que las leen son bastante caras, superando los 1.000 dólares).
  • No hay que firmar nada ni tener que acceder a una cuenta (a no ser que alojes un servidor FTP para la unidad). Sólo tienes que introducir los archivos y ya está.
  • Todos tus archivos están al alcance de tu mano. Esto significa que puede manipular los datos directamente de la manera que desee.
  • Las velocidades de transferencia son tan rápidas como lo permita tu disco.
  • Llévate una copia física de todos tus datos donde quieras!

Como ocurre con cualquier otra faceta de la vida, almacenar los datos físicamente puede tener desventajas que la nube no tiene:

  • La accesibilidad de tus datos se ve dificultada por el hecho de tener que acceder a ellos físicamente. Si quieres alojar tus archivos para que otros los descarguen, tienes que configurar un servidor FTP, lo que puede ser complicado. Se mire como se mire, compartir tus archivos a través de un disco físico no es tan fácil de usar como en la nube.
  • En caso de una catástrofe que afecte a tu ordenador, tu disco también puede verse afectado. No hay forma de evitarlo.
  • Si haces una copia de seguridad de tus datos en una unidad, y esa unidad ya no quiere funcionar después de que tu sistema principal se estropee, no tienes suerte (aunque esto es bastante raro, a no ser que hablemos de un incendio u otra catástrofe similar).

Conclusión: ¿Por qué no usar ambos?

El conflicto entre el almacenamiento físico y el de la nube probablemente nunca terminará. Siempre va a haber razones por las que uno es mejor que el otro, lo que siempre parece depender de la situación. En general, estas son las pautas que deberías seguir:

Utiliza el almacenamiento en la nube cuando:

  • Almacenar archivos muy importantes de los que no puedes prescindir, pero que no contienen información que pueda comprometerte a ti o a tu reputación;
  • Almacenar archivos a los que necesitas acceder rápidamente en muchos dispositivos diferentes, como las fotos de la familia; y
  • Editar en colaboración a través de múltiples puntos de acceso, como lo harías en Google Docs.

Utiliza el almacenamiento físico cuando:

  • Almacenar archivos que podrían comprometerte de alguna manera;
  • Hacer copias de seguridad de todo el sistema; y
  • Almacenar archivos de forma permanente sin temor a perderlos por la pérdida del pago de una cuota.

Siguiendo esta fórmula, verás que ambos tipos de almacenamiento pueden coincidir más a menudo que no cuando decidas dónde guardar algo. Ahora, es el momento de tomar una decisión informada.

¿Guardas tus archivos en la nube o los dejas en una unidad física? Cuéntanos qué te ha motivado a tomar esta decisión en un comentario a continuación.