Como funciona el tapon del tanque de gasolina

El tapón de combustible es una parte importante del depósito. Aunque es pequeño, su ausencia puede acarrear una serie de problemas, que te contamos a continuación.

El tapón de combustible, también conocido como tapón de la gasolina, es una parte simple pero importante de su coche. Evita que la suciedad, los residuos y el polvo entren en el depósito de combustible y proporciona un sellado fiable.

 

Si el tapón falta o se pierde, el combustible puede perderse por evaporación, y en algunos modelos esto puede provocar problemas de arranque, ya que el sistema puede no funcionar correctamente.

 

Por lo tanto, si el tapón del depósito de combustible falta o está en mal estado, hay una serie de síntomas que pueden alertar al conductor de un posible problema, como por ejemplo

 

Si no está bien apretado.

Esta es una de las causas más comunes del cierre incorrecto del tapón de combustible. La mayoría de los tapones de combustible están diseñados para bloquearse en su posición cuando se aprietan correctamente. Si el tapón no encaja en su sitio y está suelto, es un indicio de que hay que cambiarlo.

 

2. Olor a gasolina.

Otro síntoma de un posible problema con el tapón de la gasolina es el olor a gasolina. Si la junta del tapón de combustible está dañada o desgastada, los vapores de combustible del depósito pueden salir por el cuello de llenado, provocando un olor similar al de la gasolina.

 

Compruebe que la luz de control del motor está encendida.

Si la luz de chequeo del motor está encendida, esto es otra señal de que puede haber un problema con la tapa de combustible y recuerde, esto puede causar problemas. Un tapón de combustible mal cerrado puede provocar una fuga en el sistema EVAP, haciendo que se encienda la luz de revisión del motor cuando se detecten gases de escape. También puede encenderse si hay otros problemas con el motor.

 

Un tapón de combustible defectuoso puede no causar problemas graves de rendimiento, pero puede hacer que se encienda la luz de revisión del motor y que sea imposible pasar una prueba de emisiones.

 

Comprueba que la tuerca está apretada y sujétala para ver si se mueve. Compruebe también la junta: si está obstruida, debe ser sustituida inmediatamente.

 

Ante la más mínima sospecha de que el tapón del depósito de combustible pueda estar dañado, hágalo revisar por un profesional para determinar si es necesario sustituirlo.